26 agosto 2005

POWERWOLF "Return in Bloodred"

(Metal Blade Records)

Para todos aquellos que crecimos escuchando álbumes como "Don’t Break The Oath" o "Fatal Portrait", es una alegría encontrarnos con grupos que aún practican buen Metal basado en historias de hombres-lobo y vampiros, una temática que parecía monopolizada por el Black escandinavo. Estos novedosos Powerwolf vienen liderados por Attila Dorn, poderoso vocalista de origen rumano que se muestra como un alumno aventajado de King Diamond, de las guitarras y el bajo se encargan los hermanos Matthew y Charles Greywolf (verdaderos cerebros pensantes de todo este tinglado), al órgano (el eclesiástico, se entiende) Falk Maria Schelegel, y a la batería Stéfane Funèbre. El álbum ha sido bastante bien producido por Fredrik Nordstöm, antiguo colaborador de Hammerfall o In Flames. Aunque el estilo musical de "Return In Bloodred" se mueva por unos derroteros más cercanos a Black Sabbath (era Ozzy) que por unos primerizos Mercyful Fate, la influencia del Rey Diamante es clara y notoria a lo largo de todo el disco. La cual se muestra contundente en la inicial “Mr.Sinister”, “Montecore” o “Son Of The Morning Star”, deudoras de las tétricas melodías y tenebrosas historias del cantante danés. Otras, como las machaconas y espesas “The Evil Made Me Do It” o “Lucifer In Starlight”, no pasan del aprobadillo raspado (siendo muy generosos…). Pero “Kiss Of The Cobra King” bien podría considerarse heredera directa de las marchosas “The Age Of Pamparius” o “Get It On” de los cada vez más de moda Turbonegro, y que bien promocionada podría convertirse en todo un hit. Un trabajo más que correcto si añoras obras capitales como Melissa o Abigail.
Rafa Carrillo

TRIBUTE TO A MADMAN "Homenaje a Ozzy"

(El Diablo)

La maquinaria Ozzy está que no para: se edita caja recopilatoria, vuelven Black Sabbath a los escenarios, el susodicho continúa haciendo el cretino en la tele, y para colmo... le hacen un tributo en España!!! El responsable del mismo es Jorge Escobedo (guitarrista de Sôber), el cual se ha encargado de coordinar tan magno proyecto. El tributo en cuestión ha quedado bastante curioso, ya que además de las versiones poco arriesgadas (Lujuria con un planote "Shot In The Dark" o la casi clavada "Killer Of Giants" del tío Silver); grupos como S.A. (tremendo su cover del "Over The Mountain"), Misery (que no salen muy mal parados con su popera recreación de "So Tired"), u O’Funkillo (vistosa su adaptación psudo flamenca de "Gets Me Through") amplían el espectro musical del típico tributo por y para jevilones. A destacar la magnífica "Mr. Crowley" de Dark Moor, la sobria pero efectiva "Desire" a cargo de Sherpa (dotada de un sobresaliente punteo de Luís Cruz), y la épica "No More Tears" revisada por los propios Sôber. El disco finaliza con la interpretación de la hermosa "Mama I’m Coming Home" por gran parte de los implicados (autodenominados para la ocasión The Mad Ones), que a modo de Hear ‘N Aid van desgranando estrofas para juntarse todos al final (cual orfeón) y rematar la faena. Para redondear la jugada, al CD le acompaña un jugoso DVD de 90 mins., en el que los propios músicos hablan de sus impresiones sobre el loco maravilloso, intercalando además escenas de sus propias sesiones de grabación. Ahora sólo queda ver si se animan a lanzar una segunda parte, que temas no les van faltar.
Rafa Carrillo

RICHIE KOTZEN "Acoustic Cuts"

(Frontiers / Mastertrax)

Un gran día para mí, fue sin duda, la pasada semana. Mis guardias, me habían sacado de la oscura y acolchada celda y sin mediar palabra, (dato nada extraño por otro parte), fui soltado y dejado al libre albedrío..... por la Red de Metro de Madrid! Bueno, era un principio. "Acompañándome", tan sólo mi billete de "Ida" y el Discman que parecía, lo menos, me habían prestado. Cansado ya de correr con la lengua ladeada, por sus extensos pasillos y regalar saludos a los viandantes, que, al contrario que los de mi ubicación habitual, no eran correspondidos, me percaté, según entraba en uno de sus tumultuosos vagones, que mi soporte musical aún estaba apagado. Sin perder un instante me dispuse a escuchar. Recién reposé en un asiento que gentilmente me prestó un niño de 3 años, (el hecho de que el pequeño saliera disparado justo en el momento en el que chocó con mi cadera supongo que sería una mera casualidad), la música comenzó a sonar. Pero algo era distinto, el estruendo que me esperaba, se convirtió en la cálida melodía de una acústica y una voz por la que daría 1 de mis 30 dedos. El personaje en cuestión era Richie Kotzen, peculiar guitarrista nacido en Pennsylvania, que a lo largo de los años, ha sorprendido por su estilo y forma de tocar, (Hard Rock con influencias Bluseras), y que además de tener en su curriculum casi una decena de trabajos editados, ha contribuido, (para bien o para mal), a la carrera musical de bandas como Poison o Mr. Big. Pues lo que ha realizado en este "Acoustic Cuts", (aunque el título no dé cabida a mucha explicación), es, recoger lo que Kotzen ha considerado lo mejor de su carrera, (exceptuando su último "Get Up"), tan sólo sustentados por su voz, (sorprendente), y una guitarra acústica. No he tenido el honor de escuchar los temas originales pero en este "A. C.", la melodía de cortes como "Change", "What Is", "High", "Rust" o "You’ve Got A Fire" me sumieron en la más absoluta tranquilidad, llegando a perder el estado de la realidad de tal manera que cuando "desperté" volvía a estar en mi cómodo habitáculo. Desde luego este CD, es para ponerte los cascos, apagar la luz, cerrar los ojos (en esta ocasión el orden si altera el producto) y ponerte a disfrutarlo y escucharlo sin ningún tipo de estrés. Una recomendación: al acabar ya puedes ponerte "caña" con el último de Freedom Call, sino quieres correr el riesgo de quedarte como el "atolondrado" del...
Capitán Pinkiller

TWILIGHTNING "Plague House Puppet Show"

(Spinefarm / GOI)

Si en 2003 estos fineses nos regalaban un debut, "Delirium Veil", que apenas si llamó la atención en el mundillo a pesar de estar producido por Timo Tolkki de Stratovarius (o tal vez por eso mismo, visto lo visto), ahora se revisitan y han logrado un estupendo segundo álbum. De momento, su estilo, centrado al principio en el Power Metal melódico, ha llegado a un puntito de originalidad (lo que es un logro), ahondando en nuevos sonidos (sobre todo en el tratamiento de los sonidos sintetizados de los teclados) y ritmos (desde los más clásicos hasta el Rock melódico pasando por ligeros toques progresivos). "Plague House..." abandona la imaginería habitual del género desde su portada, que podría recordar desde un grupo de Death Metal hasta uno de raíces Nu o Industrial. Nada de eso, el Cd se abre con un corte a lo Primal Fear del comienzo (o a los Gamma Ray también del comienzo) algo más melódicos, pero se descubre rozando el Hard Rock melódico y elegante de unos Millenium o Fair Warning en "Into Treason", "In the Fervor’s Frontier" o la preciosa balada "Painting the Blue Eyes", unos Axxis o unos Ten incluso, todo bien perfilado con ramalazos a los Dream Theater menos enrevesados y la omnipresencia de los grupos de Power Metal de la última ola finlandesa que, a pesar de su influencia, ya no siguen siendo la base de Twilightning ni de lejos. "Victim of Deceit" nos deja un dibujo clásico de Heavy melódico con gancho; "Diamonds of Mankind" nos abandona a un medio tiempo con fuerza y melodía a raudales, cambios de ritmo y coros bien conseguidos que gana intensidad a cada segundo; o "Lubricious Thoughts", que recuerda a una mezcla de los Dream Theater más accesibles y a un buen puñado de bandas de Hard Rock europeas a la vez, con un espectacular trabajo de guitarras a lo largo y ancho de la canción. Un gran descubrimiento es la voz de Heikki Pöyhïa, que te recordará a los señores LaBrie, Scheepers o Weiss, con diferentes registros y excelente ejecución. Los fineses han logrado un gran trabajo, con sus dosis de originalidad y la sensación de que no son una banda más de Power Metal. De hecho no lo son, pues un CD que no te aburre en ningún momento no puede ser uno más.
Juanma Martínez

GRAVE DIGGER "The Last Supper"

(Nuclear Blast / Mastertrax)

Decimocuarto álbum de los teutones, sin contar dos recopilatorios. Todo un alarde de subsistencia en el negocio (más de veinte años ya) el de las huestes de Chris Boltendahl (voz y alma). Después de un grandilocuente "Rheingold", el presente álbum, basado en la pasión de Cristo (no sé si en la versión gore-cinematográfica de Mel Gibson), nos conduce con más intención que nunca a otras marcas de fábrica de la banda y a álbumes más añejos. No por eso dejan de lado el sonido más melódico de "Rheingold" en cortes como el que da título, "Black Widows" o la extensa "Crucified", por ejemplo. Sin embargo, el tono general es el de composiciones más directas, más acordes con lo que estos chicos hacían hace en los ochenta y primeros noventa, con muchas influencias de Accept o los mismos Judas Priest, como se comprueba en "Hell to Pay", "Desert Rose", "The Night Before" o "Grave in the No Man’s Land", pero con la fuerza y la contundencia que les caracteriza. Un trabajo que no va a sorprender a estas alturas a nadie, aunque algunos agradezcamos ese sutil giro, ese guiño a otras épocas marca de la casa. Un trabajo que sigue manteniendo muy vivos a los alemanes cavadores de tumbas, con un Manni Schmidt (guitarra, ex-Rage) más que asentado en sus filas (ya van tres discos) y plenamente consciente de la idiosincrasia de los de Boltendahl. Un Cd que, personalmente, creo que supera a sus últimos predecesores, mucho más directo y sin tanta orquestación, y que te deja un buen sabor de boca (mira que yo antes era incapaz de tragarme entero uno de sus álbumes y éste, como "Rheingold" anteriormente, me los digiero sin necesidad de sal de frutas).
Juanma Martínez

LAST AUTUMN’S DREAM "II"

(Frontiers / Mastertrax)

Tras el prometedor debut aparecido el año pasado, la banda de Mikael Erlandsson (voz) y Andy Malecek (guitarra) vuelven con un nuevo disco que ha supuesto una decepción considerable (al menos para mí). No sé si tendrá algo que ver la huida de la sección rítmica de Europe, los cuales han sido reemplazados por unos músicos de solvencia garantizada, como son Marcel Jacob (bajo) y Jamie Borger (batería), provenientes ambos de Talisman, mientras que a las teclas se sienta ahora Thomas Lassar (Crystal Blue). Un cambio a priori incluso positivo, pero que ha dejado al combo totalmente cojo de buenas composiciones y empaque como banda. Me explico, si en el anterior trabajo del grupo los temas sonaban frescos y contundentes, en este suenan muy flojos y con un sonido planote. Y es que la producción del redondo es sencillamente para echarse a llorar, totalmente impropia para un proyecto de estas características. Para terminar de cagarla, la ordenación de los temas resulta algo extraña: comienzan con la tristona "Brand New Life" y la excesivamente poppy "Lost In You". El asunto parece arreglarse con "Heat Of Emotion", grabada previamente por Fair Warning (anterior banda de Andy Malecek), hard escandinavo bien construido pero lastrado en esta ocasión por un sonido maquetero. "So Much Love In This World" es una ñoña balada, seguida de "Helpless" que posee unos teclados de vergüenza ajena. Y para redondear la jugada "This Gotta Be love", simplemente mala. Cuando ya estaba a punto de tirar la toalla, llegan los dos mejores cortes del álbum: "Up In Paradise" (influencias de Stryper en el estribillo) y "Over And Out", con buenos coros y melodías bastante aceptables. Pero continúa el tostón con "(Always Be) You & I", clavadita al "Tears In Heaven" del manolenta Eric Clapton, siguiendo con "Running" y "Round & Round", que no consiguen levantar el tedio generado. Cierran el chiringo con la correcta "Keep Falling" (menos mal) y el pastelazo "A Place To Hide In Town". Veredicto: Suspenso.
Rafa Carrillo

HAMMERFALL "Chapter V: Unbent, Unbowed, Unbroken"

(Nuclear Blast / Mastertrax)

El propio título indica que los suecos nos presentan su quinto trabajo en estudio. Para muchos, "Crimson Thunder", su anterior entrega, representó una decepción. No sólo porque no parecían los mismos, abandonando esa rapidez tan característica de ellos, también porque, salvo excepciones, las canciones eran un tanto insulsas y aburridas. En esta ocasión, aunque continúan en la misma línea, el resultado es mucho más positivo. Me explicaré. Definitivamente, parece que Hammerfall han dejado de lado la caña del power metal para volver a la raíz del mismo género, el heavy metal a secas. Sin duda habrá quien opine que esta "evolución" es en realidad involución. Ahora bien, si las composiciones son buenas, vuelven los estribillos grandiosos, y conservan casi intacto su sonido de siempre, a mí no me importa si son un poco menos acelerados. ¿Será que se hacen mayores? Ni idea. No podemos decir que sean mejores ni peores, sólo un poco diferentes. Las dos joyas del CD son "Blood Bound" y "Take The Black", himnos de lo más comercial que posiblemente queden fijas en el repertorio en directo una vez finalice la gira de presentación de este disco. En cuanto al resto de cortes, aunque en general están muy bien, es difícil destacar unos sobre otros, son bastante parecidos. Quizá para evitar que el disco se convierta en monótono, encontramos un par de curiosidades. La instrumental "Imperial", con un sabor muy medieval, y "Kings Of The 21st Century", la típica larga con constantes cambios de ritmo. Los cruzados no han sido muy aficionados a estas composiciones de más de diez minutos. En resumen, todo es cuestión de opiniones. Por mi parte, todo el mundo tiene derecho a no encasillarse y variar su estilo, siempre y cuando siga produciendo temas buenos.
Nacho Jordán

EYES OF SHIVA "Eyes of Soul"

(Locomotive)

La sombra de Angra en Brasil es muy alargada. Y una de las formaciones que han crecido últimamente al rebufo de la banda de Kiko Loureiro y compañía son este quinteto que se hacen llamar Eyes of Shiva, en clara referencia a la mitología hindú. Aunque su música poco tiene que ver con el país de los elefantes, lo suyo es power melódico, bastante bien estructurado y elaborado, y con muchas referencias al folklore de su país de origen, aliñado con partes orquestales. Vamos, que suena a Angra por todos lados, con un poco menos de calidad en sus componentes, pero con bastante buen gusto a la hora de componer su música. Sus raíces salen a relucir sobre todo en el principio del disco, con la intro "Escape", con los dos primeros temas "Eagle of Sun" y "Lampiao", con muchos elementos autóctonos mezclados con una buena base metalera, percusiones, bandoneones, y demás instrumentos poco habituales se hacen notar en estos dos buenos temas, al igual que en "Eyes of Soul" llena de cambios de ritmo. En el resto del disco resalta más la orquestación y los coros que acompañan a la correcta voz de André Ferrari, como en la épica "Psychos of the New Millennium" o las más directas ""World Tomorrow" y "Future", sin olvidar la barroca final "Just a Miracle". La parte más relajada del trabajo viene con "Pride", una buena balada con presencia destacada de piano junto a la voz de Ferrari, y con una fiel y buenísima versión de "Alone" de los grandes del A.O.R. Heart, y que es de lo mejor del disco. Un interesante trabajo, aunque suene mucho a sus paisanos reiteradamente mencionados.
Mariano Palomo

JOE LYNN TURNER "The Usual Suspects"

(Frontiers / Mastertrax)

Después de un montón de tiempo sacando muchos y buenos discos, puede que estemos ante uno de los mejores trabajos de Mr. Turner en años. "The Unusual Suspects" reúne todos los elementos que pueden hacer de él un clásico del Hard Rock con mayúsculas. Buenas y enganchantes composiciones, buen trabajo de guitarras a cargo de Karl Cochran y del polifacético Al Pitrelli, sonido clásico de los mejores referentes del estilo (el nombre de Rainbow viene inmediatamente a colación escuchado este trabajo), buena producción a cargo de Bob Held y del propio Joe Lynn Turner. En fin, un plato con unos ingredientes inmejorables y con un resultado final de lo más suculento. Se sirve en once raciones, cada una con su sabor propio. Empieza con "Power Of Love" single clarísimo de hard rock melódico ochentero, bien secundado por la más melódica "Rest Of My Life" con unas voces femeninas preciosas que ponen el contrapunto a la voz de Turner. Aunque estas se hacen más presentes en la maravillosa "Really Loved" un pedazo de balada - medio tiempo que recuerda a "Rescue You" primer y glorioso disco en solitario de vocalista americano. En la misma onda pero más eléctrica nos encontramos con "All Alone" un poco más floja, y con la más balada del disco "Live And Love Again" con un sonido de guitarra muy a lo Aerosmith, lujo para los oídos. He dejado para el final los temas más acelerados que tienen ramalazos de la última etapa de los mencionados Rainbow, no en vano en este disco participan el teclista Paul Morris (magnífica ejecutoria a lo largo del disco junto al otro encargado de las teclas Andy Burton) y el contundente batería John O’Reilly dos de los músicos que acompañaron a Blackmore en su último disco bajo el nombre del Arco Iris, y que ya colaboraron en directo con Turner antes de que Ritchie se los "levantara". Los temas en cuestión, que me lío, "Devil’s Door" clasicota a más no poder; "Jack Kniffe" trepidante juego de teclas hammond y guitarras con Joe en los tonos más altos; "Into The Fire" más calmada con estribillo machacón, pero de lo menos destacado del trabajo, junto a "Blood Money" que se hace un poco monótona, ambas bajan un poco la nota del disco; todo lo contrario que "Ball and Chain" que parece un tema más de HTP o del propio Hughes en solitario; cierre de lujo con la brillante "Unfinished Business" que te hace mover el pie en cuanto te descuidas. Los que seguimos echando de menos a Rainbow tenemos en este disco un buen trabajo para disfrutar hasta que se decidan a volver.
Mariano Palomo

SHY "Sunset And Vine"

(MTM / Goi Music)

Señoras y señores, con ustedes uno de los mejores discos de Hard A.O.R. del siglo XXI. Y quizá lo que uno menos se esperara es que un discazo de este nivel viniera de las Islas Británicas, tan castigadas últimamente por la indiferencia de medios y público en el entorno del rock más melódico, pero el nombre de Shy sigue estando muy por encima de modas y fronteras. Ya desde su vuelta por la puerta grande con "Unfinished Business" hace tres años recuperamos a los mejores Shy, con la voz inconfundible de Tony Mills y rescatando todo su mejor bagaje melódico que nos dejaron en obras maestras como "Excess All Areas" o "Brave the Storm". En este "Sunset And Vine" encontramos todo lo que se le puede pedir a un disco de rock melódico de altura, sobre todo con un trato de las voces espectacular, con Tony Mills inmenso, recordando en algunos pasajes a Steve Perry o al Tony Harnell menos chillón, acompañado siempre por unos buenísimos coros, que envuelven un sonido limpio y lleno de clase que sale de los instrumentos de toda la banda. No me resisto a destacar la labor del guitarrista Steve Harris (no confundir) en los solos, que aunque largos no se hacen pesados por la cantidad de matices que trasmiten, jugando con la rítmica de Ian Richardson y con los teclados, no excesivos y eficaces, de Joe Basketts. En cuanto a los temas es realmente complicado destacar alguno sobre el resto, todos siguen una línea similar, algunos más rápidos y rockeros como "Open Your Heart" que tiene pinta de primer single, "You Could Be Dreaming" con dominio de los juegos de voces, "Soul Searching", "Don’t Jump the Gun" con una bonita combinación electro-acústica, "First Love" que se clava en el oído a base de clase y calidad, o "Walk Through the Fire". Otros transcurren más medio tiempo como "High Time" que abre el disco fantásticamente, "Where Is the Love" que roza el baladeo con bastante protagonismo de guitarras de lo más variadas, al igual que en "I’ll Be Home Tonight", para eso son las dos más largas del disco, con más de siete minutos cada una. Cierran esta hora larga de deleite musical con "Slowly" con unos arreglos inmensos que hacen que, a pesar de lo extenso del metraje quieras escuchar los diez temas del disco una y otra vez. Imprescindible.
Mariano Palomo

THUNDER "The Magnificent Seventh"

(Frontiers / Mastertrax)

Lo han vuelto a conseguir. Los británicos Thunder de nuevo nos obsequian con un buen disco de hard rock lleno de calidad y regusto clásico, como prácticamente todos los que han tenido a bien publicar a lo largo de su extensa carrera. “The Magnificent Seventh” es el atinado título de esta obra, por lo que tiene de magnifico y por lo que supone en la historia del grupo, su séptimo trabajo. En él podemos encontrar la esencia rockera de los Thunder más clásicos en cortes como: la trabajada “The Gods Of Love”, la más dinámica con pianola incluida “You Can’t Keep A Good Man Down” que parece ajustarse a la temática western de la portada y el libreto (muy cachondo por cierto), la buenísima “Fade Into the Sun” con cierto aire dramático, y por supuesto “I Love You More Than Rock n’Roll” el primer single que apareció como adelanto junto a otros tres temas en un mini CD y que es tiene trazas de convertirse en un nuevo himno de la banda. Más pesados en cuanto a los sonidos de guitarra se sitúan con “”Monkey See, Monkey Do” y con “The Pride”, destilando un sonido a los Zeppelin más competentes. Por supuesto no se han olvidado de su parte más melódica y acústica, que tan bien dominan, con dos preciosas piezas como “I’m Dreaming Again”, la más Bad Company del disco, y con una maravilla que lleva por título “Together Or Appart” y que bien podían haber llamado “Low Life In High Places (Part 2)”, ya que recuerda al temazo que incluían en su segundo trabajo “Laugthing On Judgement Day” y al que dan buena réplica con unos fantásticos juegos de guitarras acústicas y eléctricas a cargo del también teclista Ben Mathews y del cerebro del grupo, el genial Luke Morley que me da la impresión que ha disfrutado enormemente grabando este disco. Como curiosidad quedan “One Fatal Kiss” un tema resultón con buenos coros, co escrito por el propio Morley y por el mítico compositor Russ Ballard (Rainbow, entre otros); y la pegadiza “Amy’s On The Run” que en su texto narra los avatares de un transexual casado y con hijos. En todo el disco la voz de Danny Bowes, otro de los puntos fuertes de Thunder, sigue estando a una gran altura, recordando inevitablemente a Paul Rodgers pero con su toque personal labrado a lo largo de los años. El sonido en general es más que bueno, producido una vez más por el omnipresente Morley, sonando todo muy sólido y en su sitio, con la batería de Harry James y el bajo de Chris Childs bastante presentes, sobre todo en los temas más cañeros. Si te gustan Thunder este disco no te va a defraudar. Siguen siendo garantía de calidad, no lo dejes pasar.
Mariano Palomo

DARK TRANQUILITY "Character"

(Century Media / Frontline)

Carácter, título idoneo para definir esta nueva remesa de piezas que nos llega de fría Suecia de la mano, de la mente y de la destacable personalidad artística de la formación comandada por el vocalista Mikael Stanne, y el guitarrista (y portadista) Niklas Sundin. Difícil es definir con exactitud este espectacular mosaico sonoro que ha construido el grupo de Goteburgo, que aunque notablemente sostenido sobre su habitual sonido repleto de death metal melódico y ante la inquieta y esperta mirada del prestigioso productor Fredrik Nordstrom, a variado a base de un ligero giro de tuerca a terrenos reparidos a partes iguales en intensidad, agresividad, emotividad, y ante todo, el reseñado carácter, todo ello salpicado de pasajes electrónicos, con tienen por qué ir reñidos con la buena música, personal e intransferible que practican los nórdicos. "Character" en definitiva se nos muestra como un trabajo marca de la casa trabajdo desde la experiencia y veteranía y con la mirada claramente fijada en un patrón evolutivo, eso sí, acelerado, contundente y no apto para cardiacos ni para receptores poco acostumbrados a emociones fuertes.
José Mora

FIREWIND "Forged By Fire"

(Century Media / Frontline)

Calidad, fuerza elegancia, hasta sutil arrogancia entiendo que arroja la tercera entrega de la formación liderada por el virtuoso guitarrista griego Gus G., un músico que paso a paso y a golpe de talento se está haciendo un importante hueco dentro de la actual escena del heavy metal. A pesar de que el hacha heleno es también componente de bandas como Nightrage o Mystic Prophecy, la mayor fama la adquirio en Dream Evil, grupo al cual decidió abandonar tras la publicación del excelente "The Book of Heavy Metal", para centrarse en su principal debilidad que es la que nos ocupa: Firewind. "Forged By Fire" es, como su propio título indica una sensacional obra forjada en fuego, y si queremos, revestida de cuero, un trabajo de heavy metal clásico con mayúsculas dotado de una producción y sonido más actualizado, y que está llamado a ser uno de los discos más interesantes dentro del género en el presente año 2005. Lo tiene todo, un líder y compositor impecable, una labor vocal sobresaliente a cargo de Chitral Somapala (ex cantante de Avalon), interesantes colaboraciones de guitarristas de la talla de Marty Friedman y James Murphy, y aunténtico himnos afilados repletos de actitud como "Escape From Tomorrow", "Tyrany", "Kill to Live", "Burn in Hell", o "Hate World Hero". Insultantemente brillante, totalmente reconfortante.
José Mora

EBONY ARK "Decoder"

(Avispa)

Hace tiempo que Ebony Ark se convirtieron en una de mis apuestas personales. A su alto nivel técnico y creativo se le sumaba una apuesta cimentada en una firme personalidad que apuntaba muy alto absorviendo ingredientes progresivos y matices contemporáneos, sin duda una propuesta arriesgada y por consiguiente valiente. En un pasado reciente se tiraron al barro sin miedo a ensuciar su elegante indumentaria trabajándose en forma de maqueta una brillante carta de presentación, de la cual rescatan en la actualidad para su álbum debut los temas "Night’s Cold Symphony", "Farewell" y "Dreaming Silence", creo que de manera acertada. Otra de las virtudes de Ebony Ark es su tesón y su total claridad no cediendo un ápice ni realizando ningún tipo de concesión a ninguna estructura musical en la cual no crean ciegamente, lo cual incluso les ha llevado a autoeditarse su obra en la que no han escatimado ningún tipo de esfuerzo dentro de sus posibilidades, Impactante desde el principio es la presentación del trabajo, comenzando por su gótica e impactante portada realizada con arte por Javier Simancas y Carlos Peña, absolutamente ideal para hacerte visualmente la idea de la compleja amalgama de sonidos que contiene el producto fonográfico que tienes entre las manos. La producción de "Decoder" corre a cuenta del prestigioso Big Simon, José Garrido (guitarra de Arwen) y Dani Melián (bajista del grupo), que sacan pretróleo en estado puro de una grabación efectuada en los estudios New Life y posteriormente mezclada y masterizada en los conocidos M20 por parte del propio Big Simon, sin duda toda una garantía. Simón también aparece como colaborador en el disco a modo de narrador; otras curiosas y reseñables apariciones son las de componentes de bandas como Cripta o Terroristars que ponen su toque especial en la entrega. La formación al completo se desenvuelve, como cabía esperar, como pez en el agua, sumergiéndose en espirales intensas como "Dead Men’s Live", "Damned By the Past" o "Desire", piezas versátiles, unas más oscuras, otras dotadas de aires progresivos, encontrando tiempo para recubrir de melodía y al mismo tiempo de agresividad, y con todo esto hasta se permiten sacar de su imaginaria chistera alguna joya más accesible como la preciosa "Searching For an Answer". Imposible resulta dejar pasar por alto la labor de la vocalista Beatriz Albert, poseedora de un registro majestuoso, como la de todos los miembros de la formación que lucen tanto colectiva como individualmente con luz propia, y que reclaman con urgencia un reconocimiento tanto dentro como fuera de nuestras fronteras por la calidad y proyección internacional que atesoran. Todo un lujo.
José Mora

STARBREAKER "Starbreaker"

(Frontiers / Mastertrax)

El exitoso regreso de los chicos de TNT nos dejó a todos un poco estupefactos. Pocos esperaban de ese regreso la calidad que Tony Harnell y sus chicos nos ofrecieron, sobretodo después de algunos fiascos en los ’90. Ha debido ser esto lo que le ha puesto las pilas a Mr. Harnell, porque el año pasado le veíamos en directo por tierras españolas con TNT (en mayo les volveremos a ver), y este lo estrena con nuevo proyecto. Junto a Magnus Karlsson, habitual guitarra de Last Tribe, John Macaluso (batería en Ark, Yngwie Malmsteen ó TNT) y Fabricio Grossi, que además de tocar el bajo, produce el disco, aparece este Starbreaker, que no es sino una aventura por los sonidos más extremos del Rock Melódico (¡si ello es posible!). Con la voz más heavy que Toni H. es capaz de ofrecer, comienza este trabajo. "Die For You" es hard rock del más contundente, del que en los ochenta practicaban gente como Cinderella, etc. Continúa con otro contundente trallazo hardrockero titulado "Lies", en el que Tony Harnell hace una auténtica exhibición vocal, haciendo un recorrido por todas las tesituras que es capaz de desarrollar. Los teclados (también a cargo de Magnus K.) acompañan y llenan espacios vacíos, convirtiendo los temas en vendavales sonoros sin un resquicio para el respiro. La base rítmica es excelente, sobretodo por el buen nivel de Fabricio con su bajo. A estas alturas, mientras escucho el tercer corte "Break My Bones", hay algo que no me acaba de entrar... la producción. Suena todo demasiado embarullado. Resulta difícil distinguir unos sonidos de otros, siendo la guitarra la más perjudicada. En "Crushed", la batería, sobre todo los platos, están incluso por encima de la voz y la guitarra en demasiadas ocasiones. La balada "Days of Confusion" tiene un piano muy emotivo, aunque peca de lo mismo que los demás temas. Tony Harnell raya a un nivel sensacional, quizás por encima de lo que hace con TNT. Las composiciones se oscurecen, se modernizan, por momentos. "Transparent" y, sobre todo, "Light at the end of the World" siguen en la línea de los sonidos saturados. En esta última, durante el solo de guitarra, suena la batería por encima del instrumento que debería llevarse el protagonismo. Por otra parte, se perciben ciertas melodías, más típicas de las bandas de "gothic melodic metal" (¡peazo etiqueta!) como Evanscense o Within Temptation. "Cradle to the Grave" es un tema bastante pesado. "Underneath a Falling Sky" es de los más oscuros del disco, aunque sin dejar los riffs y las melodías vocales habituales en el hard rock. Sin embargo, para el final del disco, nos reservan los tres mejores temas. "Turn It Off" contiene uno de los mejores riffs del disco. El penúltimo "Dragonfly", es una instrumental compuesta por la base rítmica, Fabrizio y Macaluso, muy rápida, en un rollo a mitad de camino entre Steve Vai y Mattias Enklund. Quizás el tema con mejor sonido sea este fantástico "Save Yourself", que sirve de epílogo para el disco, y que perfectamente podrían firmar los mismísimos TNT (aunque hubiera estado entre los más fuertes). Buena colección de temas, que hubieran brillado con mucha más intensidad si hubieran dispuesto de un sonido más claro. TNT con influencias de Last Tribe, y viceversa. En definitiva, un disco con la calidad... "distraída".
Carlos Treviño Cobo

JORGE SALÁN "From Now On"

(Pak / Avispa)

Por fin queda despejada la incógnita de todos aquellos que se preguntaban si Jorge sería capaz de mantener el sorprendente nivel de su ópera prima. Tan extraordinario guitarrista no se ha diluido entre sombras, sino que ha sido protagonista de innumerables colaboraciones, tanto para grandes como pequeñas bandas, dentro y fuera de España (el cantante alemán Hubi Meisel ha contado con sus servicios para su nuevo disco). Todos sabemos ya que una de esas colaboraciones, José Andrea y el "Belfast", le ha llevado a trabajar como miembro estable de Mago de Oz, la banda que más público mueve del rock español. Sin embargo, esto no va a impedir que continúe con su carrera en solitario, y prueba de ello es este fantástico "From Now On". Un compendio de temas que van desde los sonidos celtas, pasando por el rock más agresivo, el más suave e incluso el más intimista. Apoyado por Luis Miguel Navalón y Fernando Mainer al bajo, Javi Díez en el teclado y José Mena a la batería, amén de las habituales colaboraciones, ha grabado una colección de temazos envidiables. Desde el comienzo queda claro que va a por todas, con la potente "Aprehensión" donde da rienda suelta a su rabia con extraordinarios riffs llenos de energía y elegancia. Es el único tema en el que colabora Edu Brenes (Terroristars) como batería. "The Endless Battle" es uno de los mejores temas de rock celta que he escuchado nunca. Absolutamente inspiradora, tanto su trabajo con las guitarras como el de Fernando Pindi con la gaita son extraordinarios, logrando que percibas las sensaciones festivas que el rock celta siempre ha buscado. El primer tema comercial del CD es "I’ll Be Waiting", en el que vuelve a trabajar con Jorge, el catalán Pau Sastre, que en esta ocasión no solo canta sino que produce todo el trabajo. Resulta imposible evitar que el cuerpo se mueva al ritmo de una música pegadiza absolutamente "radiable" en cualquier programa musical de cualquier cadena. "Back in Time" es otra incursión en los sonidos más comerciales, de la mano de Tony Guerrero, que no solo canta como Brian Adams, sino que ha compuesto, junto a Jorge, este tema muy en la línea del canadiense. Con "Pathways to Death" comenzamos a dilucidar al Salán más personal. No solo su sonido comienza a ser "su propio estilo", además la composición no resulta comparable a nada. Pone su habitual virtuosismo al servicio de una canción escrita para el corazón, y no para las seis cuerdas. Elegantísimas guitarras "dobladas", pianos de sonido triste y efectos no habituales, son los ingredientes que enriquecen este corte que sale como segundo tema del single promocional. La balada del disco es "Doors Made of Rye", excepcionalmente interpretada por Pau Sastre, y da pié al único tema del disco que no es composición de Jorge, sino de Pau. Se titula "Brand New Day", y se trata de un acústico, que no balada, donde Pau también toca el piano, e introduce una colaboración de Roberto Jabonero (Celtas Cortos) con el violín. El mejor tema del disco es "Train of Hopes", que sirve además para su cierre. Y no lo digo solo por el genial sonido de la guitarra en su inicio, que a mí me pone la piel de gallina, sino por la forma tan elegante que tiene de escalar por el mástil y, posteriormente, por componer una de las melodías más emotivas que haya oído nunca. Y es que al fin y al cabo, qué es la música, sino sonidos procedentes del corazón y destinados a transmitir sentimientos y emociones. Pues Jorge lo ha vuelto a conseguir, y pienso que todos debemos felicitarnos por este fantástico segundo escalón que, sin duda, acabará por llevarlo muy alto... que se agarre bien.
Carlos Treviño Cobo

JUDAS PRIEST "Angel Of Retribution"

(Sony Music)

En estos últimos días se han vertido todo tipo de opiniones sobre el nuevo disco de Judas Priest: que si es la leche, que si es una ful, que si sólo molan dos temas, que si la producción es una castaña, que si Halford ya no canta como antes, etc. Seguramente lo mejor sería analizar este álbum dentro de unos años, con la perspectiva que da el paso del tiempo y sobre todo cuando toda esta oleada de comentarios haya finalizado. Pero el CD acaba de salir al mercado y mi labor es daros una valoración lo más objetiva posible del mismo, aunque quizá yo no sea el más indicado para hacerlo al considerarme un ferviente seguidor de la banda. Para empezar, debo avisaros que este "Angel Of Retribution" no es tan bueno como otras obras capitales del grupo y que todos tenemos en mente ("Painkiller", "British Steel" o "Screaming For Vengeance"), pero decididamente me resulta bastante mejor que otros lanzamientos más irregulares del grupo ("Point Of Entry" o "Ram It Down"). Así que podría decir que nos encontramos ante un trabajo de categoría media-alta, en relación al extraordinario legado discográfico de Judas Priest. Rob Halford canta las nuevas canciones realmente bien (otra cosa será cómo las interprete en directo...); brindándonos alguna que otra interpretación vocal sorprendente, sobre todo en los pasajes lentos, que nos hacen descubrir nuevos matices en la voz del Metal God. El dúo Glenn Tipton-K.K. Downing siguen compartiendo incendiarios solos (escucha "Deal With The Devil" o "Hellrider"), y soberbios riffs como los de antaño ("Wheels Of Fire" es un claro ejemplo). Ian Hill, como de costumbre, sobrio y correcto. Mientras que Scott Travis continúa aporreando la batería con la contundencia habitual, e impartiendo lecciones a casi cualquier baterista sobre como manejar el doble bombo. La producción ha corrido a cargo de Roy Z, viejo conocido de Halford y de Bruce Dickinson, que ha logrado un gran sonido para el álbum, especialmente en las partes más tranquilitas (afinad el oído con "Worth Fighting For" o "Eulogy"). En cuanto a los temas quizá hayan ido muy justos al incluir sólo 10, pero en general el nivel de los mismos es bastante alto, y el CD no se hace para nada corto. El susodicho se abre con una intro que recuerda enormemente al principio del clásico "Victim Of Changes", y que da paso a "Judas Rising", potente corte en la más pura tradición de "Painkiller" o "Freewheel Burning", aunque más contenida y sin tanta velocidad. Halford se desgañita en un par de momentos, mientras que Travis mete un doble bombo de aúpa. Continúan con "Deal With The Devil", con toda seguridad lo mejor del redondo y que sin duda funcionará de maravilla en los directos el grupo. A destacar la maestra sucesión de punteos que va intercalando la pareja Tipton/Downing, y ese regusto al "Made In Hell" del debut en solitario de Halford. Le llega el turno a "Revolution", primer single del disco, una canción cuanto menos rara (que no mala). La misma se abre con unas líneas de bajo a lo Geezer Butler, para seguir con una estructura tipo himno (véase "Take On The World" o "United"), pero con unos coros muy "alternativos", al estilo de bandas como Jane´s Addiction o Alice In Chains. E incluso a mitad de canción se atreven a hacerle un guiño a sus paisanos Led Zeppelin (oír para creer). Le sucede el medio-tiempo "Worth Fighting For", muy pegadizo y en la línea de "Out In The Cold" o "Turbo Lover", pero con un sorpresivo inicio a lo AC/DC (¿?) y unas cuidadas guitarras. Con "Demonizer" volvemos a los Judas más cañeros, aunque ésta resulte algo pesadota y oscura, con unas guitarras que parecen sacadas de "Jugulator" o "Demolition". Y a continuación una power-ballad que guarda enormes semejanzas (sobre todo en su inicio) con "Before The Dawn", pero algo más trabajada y de buen estribillo. "Hellrider" parece sacada de las sesiones de "Painkiller", con una poderosa batería y la voz de Halford funcionando a pleno rendimiento. Mientras que "Eulogy" es una siniestra y corta balada, en la que unas sutiles notas de piano la convierten en uno de los momentos álgidos del álbum. El cual se cierra con la dramática "Lochness", un corte de ¡13 minutos!, que guarda cierta relación con la prehistórica "Dreamer Deceiver/Deceiver", en cuanto a que ambas son piezas extensas y épicas. Un tema es realmente bueno, aunque la letra sea de vergüenza ajena: "Lochness, confess, your terror of the deep". En fin... Como ya sabréis existe una edición de luxe del disco que incluye un DVD, el cual recoge hasta 7 cortes grabados en el festival del Metalmania del pasado año en Valencia, y un documental de unos 40 min. sobre como surgió la reunión y las opiniones sobre Angel Of Retribution. Dicho DVD suena y se ve de lujo, pudiendo disfrutar de clásicos como "Breaking The Law", "The Hellion/Electric Eye" o la hermosa "Diamonds & Rust". A Halford se le ve muy parado y casi sin voz, el dúo Tipton/Downing en muy buena forma, Hill con la bisagra de la cadera bien engrasada y Travis aporreando como un animal. El documental es algo soso y para colmo incluye las mismas 7 canciones que van por separado. Aún con todo, es un trabajo bastante bueno y lo recomiendo a cualquier metalero que aún se precie de serlo.
Rafa Carrillo

BRECHA "En Libertad"

(Santo Grial Records)

Segunda entrega y salto de calidad a cargo de los asturianos Brecha. Si ya su primer trabajo del pasado año nos dejaron una buena carta de presentación en este “En Libertad” dan un salto de calidad notable, tanto en composición como en producción. La línea no ha variado y siguen ofreciéndonos una interesante mezcla de hard heavy rock ochentero, con buenos y pegadizos coros, con unas brillantes guitarras a cargo de Tony Bustamante y con la dosis justa de teclados envolviendo el sonido del grupo. Los temas no son excesivamente enrevesados, pero sí tienen sus matices, además muchos de estos dados por las colaboraciones, como en “Fuego” en el que, sin ser una versión, la flauta corre a cargo de José Carlos Molina, y que puede recordar un poco a la época de “Acorralado Por Ti” de sus Ñú. También ponen su voz al tema que abre el trabajo, “Tu Hada” dos voces femeninas, una ya bien conocida como la de Ruth de Darna y otra novedosa como la de María de Factor X, en un tema muy lírico y bien llevado con el juego de voces, pero sin olvidar la fuerza, sobre todo en su principio con unas guitarras muy Tipton/Downing. La voz de Juan Lozano está a un buen nivel, pero sin alardes ni estériles exhibiciones, además cede el protagonismo vocal al mismo Tony Bustamante en la más cañera “Adelante” con unos coros más oscuros que también aparecen en “Acabado” que es un poco más floja aunque sigue destacando el trabajo de guitarras de Tony. El mismísimo Víctor García de Warcry hace suya con su voz “Morir en el Intento” uno de los temas más destacados en el que se acerca más al hard rock poderoso bien llevado por los teclados de Orlando Bustamante con un resultado satisfactorio. Más pesado es el desarrollo de “Sólo Quiero La Verdad” con un cierto halo misterioso, que se torna en ritmos más dinámicos y pegadizos con la más melódica e interesante “Traidor”. Tiran de vena Rainbow – Rata Blanca con “Mi Reina”, sin llegar al nivel de estos, pero mostrando claramente sus influencias. El principio de “El Que Espera” parece que nos va a meter de lleno en un tema de los añorados Sangre Azul, pero queda la cosa en un buen tema de hard rock con un riff que nos parece haber escuchado más de una vez antes. “A Mil Por Hora” es un poco más rápida, pero no llega a la velocidad que indica su título, con coros interesantes pero algo falta de chispa. El cierre viene con “No Te Vayas”, que una vez más recuerda en su inicio a Tony Raya y compañía, resultando ser el tema más melódico del disco y de los mejores que se incluyen en el mismo, y que nos lleva unos años atrás a la época dorada del hard melódido español. Todo lo expuesto se completa con una bonita presentación en digipack, y con un DVD extra en el que encontramos desde la típica y extensa galería de fotos (algunas bastante curiosas), hasta el video clip de “Fuego” en el que combinan imágenes en directo con otras de la grabación del disco en el que aparecen todos los invitados a la misa, con un resultado bastante presentable, pasando por una actuación en directo de cuatro temas del disco que más bien es un play back tipo “Tocata” o “A Tope” de antaño en un plató sin público que para completar está bien, pero no tiene demasiado brillo, me quedo con el video clip de “Como un Halcón” incluido en su primer disco. Como podéis comprobar una entrega completita y recomendable dentro del panorama nacional y que esperamos siga creciendo.
Mariano Palomo

25 agosto 2005

VV.AA. "La Rosa de los Vientos"

(Locomotive)

Creo con firmeza en el concepto de globalización, y este término, tan de moda últimamente, lo aplico también a la música. Con este espíritu, el sello Locomotive presenta un recopilatorio de canciones y de músicos que se unen para tributar un merecido homenaje a un programa radiofónico, ejemplo para muchos, llamado "La Rosa de los Vientos". Un espacio plural, cargado de mestizaje, líder de las madrugadas en la radio, tan interesante como versátil. Para nosotros, grupos de la impronta de Mago de Oz (La Fiesta Pagana), Tierra Santa (Indomable), Medina Azahara (Necesito Respirar), o M Clan presentan su tarjeta de identidad con sus temas más conocidos, pero además otros estilos y otros músicos sorprenden al oyente, como los gallegos Luar Na Lubre con su folk celta, o el mismísimo Carlos Nuñez, con una canción maravillosa que emociona como es "El Pozo de Arán". Además, Jesús Cifuentes (Ex Celtas Cortos) o el mismísimo Sherpa , ex de Barón Rojo (ahora que ha vuelto), sorprenden con versiones inéditas de clásicos tan recordados como "20 de Abril" o "Barón Rojo". Por eso, porque resulta un merecido homenaje y por la miscelánea musical, llena de calidad que aporta, merece mucho la pena esta recopilación. Aplícate el cuento y ponla en práctica, empezando por la música. Globalización, bendita palabra.
Jesús "Nono" García

TOMMY FUNDERBURK "Anything For You"

(Frontiers / Mastertrax)

Si no conoces quién es Tommy Funderburk, si no escuchaste nada de sus anteriores proyectos como AirPlay, What If o King of Hearts, por ejemplo, te recomiendo que consigas este disco, "Anything For You", llega a tu casa, pincha el primer tema, todo un hit single como es "Learning How to Love", y descubrirás sorprendido la supervoz que tiene este tipo. Sin duda, el Sr. Funderburk es, por derecho, uno de los mejores vocalistas de AOR y rock melódico de la historia. Una garganta maravillosa, privilegiada, que Frontiers rescata del anonimato. Ya lo ha hecho con varios ejemplos recientes, como son Stan Bush, Micky Thomas (Over the Edge), James Christian o Joseph Williams (Vertigo), como muestra. Es cierto que en todos estos proyectos se nota sobremanera la producción, composición y los arreglos de Fabricio V. Zee Grossi, incluso diría que muchos suenan parecidos (mi amigo JC dice que si se superponen las voces dan el pego), pero todos son discos llenos de calidad y magníficas canciones, que recuperan el espíritu del rock melódico y nos traen de vuelta a vocalistas soberbios que estaban bastante olvidados. Este "Anything For You" recoge temas llenos de feeling como "To Say You Love Me", sensibles y retrospectivos como "Second Chance" o "Say a Little Prayer" o el truco del single del trabajo, titulado "Remember Our Love", una maravillosa canción que ya sonara, a modo de remake, con King of Hearts (Remember). En definitiva, un buen disco de hard rock melódico que recupera, para placer de muchos, a Tommy Funderburk de su silencio. Bienvenido.
Jesús "Nono" García

ARWEN "Illusions"

(Arise)

Pocas veces el título de un disco vino más a cuento, Ilusiones, las de un grupo madrileño llamado Arwen que publica su segundo y esperado trabajo, "Illusions". Sin duda, un disco más maduro, más trabajado y mejor producido que su ópera primera, "Memories of a Dream". Un notable esfuerzo por superarse, por evolucionar, por dar lo mejor de sí. Sorprende al oyente que no conoce la carrera de Arwen, o nunca los vio en directo, la cantidad de músicos que forman el grupo, empezando porque hay dos cantantes (Nacho y Mamen), o dos teclistas (Javi y Rosalva), además de José Garrido y Alberto a las guitarras y de Luisma al bajo y Nacho a la batería. Lejos de parecer una torre de Babel inconexa, aportan cada uno su granito de arena y su inspiración al grupo, dotándole de mayor versatilidad, nuevos sonidos y más variados arreglos. Arwen siempre fue un grupo abierto a muchos estilos. Este hecho se plasma en "Illusions". Piezas contundentes y agresivas como "Dance of Souls" o la propia "Illusions", se mezclan con preciosas melodías llenas de orquestación como "Keltia" o la balada "Lullaby", sensible y con un precioso piano. Además, "Touch the Sky" será con el tiempo un tema insignia, un himno que cantarán todos sus seguidores. Otros cortes como la rockera y directa "By My Own Sight" o la progresiva "Somewhere in the Past" aportan mayor variedad al trabajo. Un significativo paso adelante, y muy bien currado, para Arwen. Dejaron hace tiempo de ser una firme promesa para convertirse en toda una realidad musical. Sin duda, sus Ilusiones se verán recompensadas.
Jesús "Nono" García

RTZ "Lost And Found"

(Frontiers / Mastertrax)

Para los neófitos, conviene recordar que RTZ (Return to Zero), provienen en parte de la escisión de quizás una de las mejores (si no la mejor) banda que ha dado el género melódico: Boston. Alejados de la grandilocuencia, llena de magia y de clase, de su grupo franquicia, RTZ lanzó al mercado dos discos llenos de buen rock melódico, con temas pegadizos, donde sobresalía la clase a las guitarras de Barry Goudreau y la voz, largamente recordada, de Brad Delp. En sus composiciones, siempre sobrevoló el estigma de Boston. Ahora, y nuevamente por iniciativa del sello melódico italiano Frontiers, se rescatan cortes desechados y caras B de los primeros y únicos trabajos hasta la fecha de RTZ. Si te soy sincero, y salvando determinadas canciones "One Step Away", maravillosa; "Fool For Love" o "Power Of Love", por ejemplo, no mejoran, en su conjunto, a sus anteriores trabajos. Eso sí, para nada son malas canciones, al contrario, siguen llenas de finas melodías y todas son buenas composiciones. Pero si les conoces, te quedas con sus dos únicos discos anteriores, y si no tenías referencias de ellos, es mejor que te vayas directamente a sus orígenes. Completa con un trabajo, publicado recientemente, de los dos líderes de RTZ en solitario, es decir, los Sres Goudreau y Delp. Titulado genéricamente como ellos, los temas se mueven más en una línea soft e intimista, pero llenos de calidad. Personalmente, valoro el mérito de Frontiers de recuperar temas que quedaron en el tintero musical de RTZ, y de hacer más goloso aún el lanzamiento con un buen trabajo en solitario de Delp / Goudreau. El conjunto es meritorio, y de gran calidad, pero como siempre, te remito a las fuentes. Es allí donde suele estar la esencia de las cosas.
Jesús "Nono" García

FINAL FRONTIER "High Tension Wire"

(Frontiers / Mastertrax)

Tercer trabajo del proyecto liderado por Rob Moratti (voz) y su viejo amigo Mladen (guitarra, bajo y teclas), que ayudados por Lawrence Falcomer (también a las guitarras) y Michael Shotton (batería), vuelven a la carga con una digna continuación de su magnífico "The Second Wave", pero que ni de lejos logra alcanzar las cotas de calidad de su predecesor. Y aunque la producción del propio Mladen sigue siendo fabulosa, muy cercana a la de grupos como Shy, la chispa que impregnaba los temas de su anterior disco (óiganse si no "Runaway" o "Lost Inside A Dream") no se encuentra presente en la mayoría de los 11 cortes que configuran este nuevo CD. No obstante, incluye excelentes composiciones como la maravillosa "Listen To Your Heart", la pegadiza "Two Different Worlds" o la absorbente "Something More Than This". Pero cortes como "Hearts On Fire" (mala copia del "Stone In Love" de sus adorados Journey) o la empalagosa "Sunset At Dawn" (imaginaos a los hermanitos Nelson sumergidos en un barreño de almíbar), no hacen si no lastrar un álbum que podía haber significado la consagración total de este sensacional grupo en el mundillo del AOR. Para los coleccionistas, comentaros que la edición japonesa intercambia un tema con la europea ("Half Way Home" por "Let Me Be The One"). No obstante, y pese al notable bajonazo de nivel respecto a su anterior trabajo, "High Tension Wire" es un álbum que resulta muy agradable a la escucha y que sin duda te gustará si ya disfrutaste del genial "The Second Wave".
Rafa Carrillo

ASTRAL DOORS "Evil Is Forever"

(Locomotive Music)

Pocas han sido las bandas internacionales de Heavy que en estos últimos años han llamado mi atención, pero sin duda Astral Doors sería una de ellas. Hace ya dos años que este sensacional combo sueco lanzaba al mercado su disco debut "Of The Son And The Father". Y con este segundo trabajo, continúan desarrollando su particular visión del Metal, basada en los grandes titanes del género, como Rainbow, Black Sabbath, o el propio Dio en solitario. Y es que el parecido vocal entre el cantante del grupo, Patrik Johansson y el pequeño elfo es sencillamente asombroso. Johansson posee un enorme vozarrón equiparable al del pequeñito RJD, al de un cabreadísimo Fernando Fernán Gómez, o incluso al del poco reivindicado Tony Martin. El resto de la banda la conforman el teclista Jocke Roberg, los guitarristas Joachim Nordlund y Martin Haglund, el bajista Mika Itäranta y el batería Johan Lindstedt. "Evil Is Forever" se abre con la poderosa "Bride Of Christ", un potentísimo arranque que da paso a "Time To Rock", la cual recuerda horrores al "We Rock" de Dio. Una bella y tierna melodía de órgano Hammond da pie al impresionante corte que da título al trabajo, de aires muy Sabbath (época "Headless Cross") y gran estribillo. "Lionheart" se encarga de continuar la línea ascendente del disco, con cierto parecido a los Queensrÿche de Operation/Empire al principio de la canción. Casi sin darnos cuenta llega otro pelotazo como es "Praise The Bones", con un rollo a lo Dio (otra veeeez) del "Rainbow In The Dark". "Pull The Break" muestra el lado más veloz y directo del grupo, mientras que "Fear In Their Eyes" vuelve a introducirnos en las densas atmósferas Sabbath, por obra y gracia de otro duro y espeso riff. "Stalingrad" comienza con una intro acústica, para ir transformándose gradualmente en un corte bastante cañero, de influencias arabescas. La hardrockera "From The Cradle To The Grave" enlaza con la buenísima "The Flame", mientras que la extensa "Path To Delirium" se encarga de dar carpetazo al álbum. Esta última canción incluye una curiosa narración (otra vez los Queensrÿche del Operation salen a relucir…), efectos sonoros por doquier (sirenas, truenos, chillidos, etc.), e incluso coros operísticos (a lo "Diary Of A Madman" del loco Ozzy), que hacen de ella una pequeña joya musical. Como digo, un disco (y una banda) destinado a convertirse en uno de tus favoritos si aún veneras tus viejos vinilos de "The Last In Line", "Heaven&Hell" o "Rising". Sin temor a equivocarme podría decir que junto al de Judas Priest, este será el disco de Heavy de este 2005. Y si no, al tiempo.
Rafa Carrillo

PRIDE OF LIONS "Black Ribbons"

(Frontiers / Mastertrax)

Desde antes del verano llevábamos esperando que saliera a la venta este single. Se conocía la intención de Jim Peterik de editar un CD single, con el que homenajear a las víctimas del atentado terrorista que el 11 de Marzo de 2004 acabó con la vida de un montón de gente inocente, además de destrozar de uno u otro modo la de unas cuantas miles de personas. Por fin esta admirable y emotiva obra ve la luz, y, cuando yo esperaba un despliegue informativo más o menos interesante, que permitiera que algo así pudiera ser conocido por cuanta más gente mejor, resulta que no es así. Si además descubrimos que el dinero de la venta será destinado a las víctimas del terrorismo, aún mi incomprensión resulta mayor. Cuando me enteré que el disco ya había salido, aunque de forma muy velada, me puse a la búsqueda. En las tiendas, grandes y pequeñas, me decían que solo habían recibido dos unidades... ó que lo habían pedido pero no se lo servían... ó que era un material muy difícil de conseguir. Ante mi perplejidad, por fin lo encuentro en una pequeña "tienducha" del centro, y no expuesto, para que la gente lo pueda conocer y comprar, sino guardado en un almacén, fuera del alcance del público. En fin, que cada uno se plantee sus propias preguntas. El caso es que tengo entre mis manos esta maravilla, digna hija de tan digno padre, (Jim Peterik es un compositor impresionante). El disco se compone de tres cortes. El primero de ellos, compuesto especialmente para la ocasión, es una tremenda balada titulada "Black Ribbons (Voices of the World)", que a lo largo de sus 4:37, nos habla de la gente que iba en esos trenes, de su humildad, de la solidaridad que sintió con todos aquellos que se echaron a la calle en aquellos días, haciendo ondear sus lazos negros (Black Ribbons) al viento, exigiendo paz y justicia. La compuso el 15 de marzo, en su casa americana, mientras sufría con las imágenes que llegaban a E.E.U.U. de las manifestaciones en España. Se completa con dos temazos más, "Gone" y el clásico "I Can’t Hold Back". Grabados el 25 de enero de 2004 en directo, no son más que un complemento de calidad para lo verdaderamente importante. La portada es un enorme lazo negro con un león blanco al fondo, y en la parte inferior se puede leer "Tributo a la tragedia de Madrid". Para terminar este texto, os traduzco lo que el propio Peterik escribe en la contraportada: "Este álbum está dedicado a las víctimas y los familiares de las trágicas explosiones de trenes en Madrid, España, que acabaron con la vida de 191 personas y unos 1800 heridos el 11 de Marzo de 2004. Que el título de la canción sirva como un Lazo Negro para recordar al mundo las vidas inocentes perdidas en estos insensibles actos de terrorismo. Nunca podrán ser olvidados".Como dijo Jesús "Nono" García en el número anterior, Mr. Peterik... GRACIAS.
Carlos Treviño Cobo

KREATOR "Enemy of God"

(SPV / Mastertrax)

Cuando hace veinte años se pusieron en marcha los chicos de Kreator, formaban parte de una nueva ola musical denominada Thrash Metal, que tenía como máximos exponentes a Metallica y a Anthrax. Ellos eran una más, de las grandes bandas de los ochenta, que esparcieron la semilla de la música más dura por doquier. Sin embargo parece que es ahora, en pleno siglo XXI, cuando por fin ha llegado su momento. Este "Enemy of God" es a todas luces un grandísimo disco, cercano al metal extremo más en boga hoy, pero sin abandonar los cánones primordiales de aquel movimiento madre de todos los sonidos brutos del momento actual. La portada es una de las mejores que he visto en mucho tiempo. Obra de Joachin Latke, el mismo que ha trabajado para Rage, transmite a la perfección todo lo que contiene el CD en su interior. Y esto no es otra cosa, más que doce espectaculares cortes, tremendamente poderosos, agresivos, cantados e interpretados con convicción y limpieza, de la que es máximo responsable Andy Sneap. Desde el primer segundo del disco, con el tema que da título al disco, la velocidad es protagonista principal, con un sonido de guitarras inicialmente muy ochentero. Lo mismo ocurre con "Imposible Brutallity". En "Suicide Terrorist" la base rítmica predomina por encima de un solo de guitarra que resulta un mero adorno, ante el buen hacer de Jürgen Reil, batería, y Christian Giesler al bajo. La verdad es que este impresionante dúo resulta ser lo más importante a lo largo de los doce cortes. "World Anarchy" es pura velocidad y, quizás por ello, tiene un breve momento de relax a la mitad. "Dystopia" es otro tema clásico, mientras que "Voices of the Dead" da por fin protagonismo a las guitarras, que buscan la melodía en todo momento. Continúa la batalla contra dios con "Murder Fantasies", "When Death Takes it’s Dominion" ó "One Evil Comes - A Million Follow". El comienzo suave, acústico, de "Dying Race Apocalypse" no es más que un breve engaño, ya que inmediatamente vuelven la contundencia y la agresividad. En ocasiones la forma en que toca la batería Jürgen Reil, puede recordar a las bandas góticas ó de Death Metal. En ese sentido "Dying..." ó "Under a Total Blackened Sky" son dos buenos ejemplos. Y si el disco se abre con el tema más potente, se cierra con la mejor composición, "The Ancient Plague". En él no solo el dueto Reil / Giesler raya a una altura difícilmente igualable, sino que Petrozza y Sami Yli-Sirniö interpretan sin duda alguna las mejores melodías del disco y, quizás de Kreator. Con momentos para todo (acústico, cañero, ambiental) esta canción consigue que el Thrash Metal de los ochenta vuelva a escribirse con letras mayúsculas.
Carlos Treviño Cobo

SANDALINAS "Living on the Edge"

(Massacre)

Me atrevo ya mismo a vaticinar que este será uno de los álbumes del 2005. Los motivos son varios, en primer lugar (y como es lógico) por la calidad de los temas, pero además por practicar un estilo musical como es "el Heavy de los 80" y salir victorioso de la experiencia. Con un sonido que podría aproximarse al que desarrolla en la actualidad Pink Cream 69, pero con una clase que lo particulariza y le da carácter propio. Jordi Sandalinas es un valiente guitarrista catalán, que se lió hace ya tiempo la manta a la cabeza desplazándose ni más ni menos que hasta Suecia para grabar su primera obra, con la ayuda del mismísimo Andy LaRocque (King Diamond) a los controles. LaRocque ha logrado dotar al disco de un poderoso sonido de guitarras que se puede apreciar claramente en cada corte del mismo. Incluso se ha animado a colaborar tocando su propia guitarra en dos de los cortes del álbum. Mención aparte merece el gran vocalista Apollo Papathanasio, a medio camino de un jovencito Bruce Dickinson y un experimentado Gary Barden. Este "Living On The Edge" recoge 10 fantásticos temas de metal ochentero que os harán disfrutar a tope si os gustan bandas como Iron Maiden o MSG. En cuanto al racimo de temas seleccionado, escogería sin duda el tema que da título al álbum (de briosas guitarras y vozarrón a lo Ray Gillen), el comercial "If It Wasn’t For You" (con cierto aroma al "Can I Play With Madness" en el estribillo), la hermosa balada "Heaven In You" (melodías acústicas que parecen extraídas de "Catch The Rainbow"/"Rainbow Eyes") y la maravillosa "Die Hard" (regrabada para la ocasión y con una instrumentación semiacústica de auténtico lujo). El único punto negativo del trabajo lo localizo en "The Ritual Of Truth", un corte algo pesadote y con unos coros indignos de un trabajo de tanta calidad. Así que si deseas recuperar la magia de aquellos álbumes que escuchabas una y otra vez en el tocadiscos mientras observabas detenidamente las fotos de la funda interior del vinilo, te recomiendo imperiosamente la adquisición de este buenísimo disco que a mí por lo menos me parece todo un descubrimiento. No lo olvides, se llama Sandalinas.
Rafa Carrillo

JOHN NORUM "Optimus"

(Mascot / Mastertrax)

Después de la decepción que me supuso el disco de retorno de Europe, del que se comentaba que gran parte de la culpa de los temas era de John Norum, me mostré más que reacio a escuchar este nuevo trabajo del guitarrista sueco, que hace el número siete de su carrera en solitario, y la verdad es que estaba bastante equivocado, pues aunque también tiene unas guitarras y composiciones muy actuales, el disco es bastante mejor, que digo bastante, infinitamente superior al de la banda madre. "Optimus" se compone de diez canciones, como ya he dicho, modernas, pero no tan pausadas y lentas como las de Europe, que llegaban a aburrir. Además Norum no tiene nada que envidiar a Joey Tempest a la hora de cantar. Con la única ayuda de Thomas Torberg (bajo) y Hux Flux (batería) Norum ha sabido dar forma (redondo por cojones) a un gran disco que se inicia con "Chase down the moon", un medio tiempo con un gran estribillo. Le sigue "Nailed to the cross", dónde las guitarras son más oscuras pero el tempo más acelerado. "Better day" es una mezcla de las dos anteriores, es decir, el medio tiempo de la primera y la oscuridad de la segunda. "One more time" es un tema tranquilo, y bastante sosito, calificable de pesudo-balada; le sigue una de las mejores con "Time to run", de la que el principio me recuerda horrores al "I’ll be there for you" de The Rembrands, una banda que popularizó su canción gracias a la serie Friends. "Change will come" es la balada del disco, "Forced" podría ser la hermana de "Nailed to the cross" y "Optimus" y "Solitude" son dos instrumentales muy competentes. Mis dudas finalmente se despejan: Europe ha sacado el peor disco de su carrera y Norum el mejor desde aquel lejano "Face the truth" de 1992. Entonces me pregunto ¿habrá pensado Norum en quedarse lo mejor de su producción para su disco en solitario, y dejar para Europe las sobras? No sé, pero ahí está el famoso dicho: Piensa mal y acertarás. Buen trabajo.
Antonio Alcoba

AXEL RUDI PELL "The ballads III"

(SPV / Mastertrax)

Como viene siendo habitual, cada cinco o seis años Axel Rudi Pell nos entrega un recopilatorio con las baladas que ha ido grabando en cada uno de sus discos, y en este 2004 le tocaba el turno a "The balladas III". Para esta ocasión ha incluido once cortes, uno de ellos totalmente nuevo, "Don’t say goodbye" que es la que abre el disco, una versión del clásico "Temple of the king" de Rainbow y una versión acústica de "Forever angel", una de baladas de su último "Kings and Queens". Pero no voy a entrar más en su contenido, porque al escuchar este trabajo me ha dado tal modorra, que si me meto a describiroslo no sé si llegaré a terminar o me quedaré dormido antes. Y es que "The ballads III" es un auténtico petardo. Todos los temas son iguales, desde la primera hasta la última. Si elegimos un tema al azar nos dará la sensación de que ya la hemos escuchado antes, pues los esquemas son los mismos, los tempos también, las estructuras igual. Vamos que parece que este hombre no se come el tarro en exceso. Y si encima la duración de las canciones no baja de los seis minutos, pues en vez de baladas parece que estamos escuchando mediocres sinfonías de autores noveles. Lo siento pero no. Axel Rudi Pell perdió su crédito, al menos para mí, hace ya muchos años y este nuevo volumen baladístico es totalmente prescindible, o por lo menos para los que no sean muy muy fans. Los demás, lo dicho, abstenerse.
Antonio Alcoba

IMPELLITTERI "Pedal to the Metal"

(Victor Entertainment / SPV / Mastertrax)

Dos años después de la edición de su último disco de estudio "System X", y también de un recopilatorio para el mercado japonés, el guitarrista estadounidense Chris Impellitteri regresa al panorama musical con el vocalista Curtis Skelton, quién sustituye a un Graham Bonnet que por segunda vez ha dejado al guitarrista. Continúan en la formación el bajista James Pulli, el baterista Glen Sobel (que ha grabado el último de Jeff Scott Soto) y, aunque ahora a modo de invitado, el teclista Ed Roth (Glenn Hughes). "Pedal to the metal", que ve la luz en estos primeros compases del 2005, hace el número 12 en la carrera de Impellitteri (8 lp’s, 2 mini-lp’s, 1 recopilatorio y 1 directo editado por su club de fans). El cambio musical no es excesivamente notable desde el primer tema, aunque los riffs y los solos rápidos sean los típicos del guitarrista. La música es sensiblemente más moderna y a las primeras escuchas me costó cogerle, aunque ahora me parece un disco interesante. Quizás siga un poco la onda del anterior "System X", que ya dejaba entrever un cierto cambio de estilo, como por ejemplo en "Punk", donde parece haberse metido en la piel de Jeff Waters y sus Annihilator, mientras que en "Propaganda mind" es moderno pero tirando a la onda actual del gran Glenn Hughes, es decir, música actual pero con melodía. Hombre, este no es el mejor disco de Impellitteri, pero canciones como "The writings on the wall", con juegos de voces que recuerdan a la etapa de Rob Rock, la clásicas "Destruction" y "Dance with the devil", el medio-tiempo "Stay tonight", muy en la onda del primigenio "Stand in line" (1988), o el bonus para la edición japonesa con "The Fall of Titus (American metal Vs. Swedish metal)", merecen bastante la pena. Buen disco de retorno del guitarrista americano que ha contando, al menos para la portada japonesa, con Derek Riggs, más conocido por su trabajo con Iron Maiden, aunque aquí no se haya lucido demasiado.
Antonio Alcoba

WARCRY "¿Dónde Está La Luz?"

(Jaus Records/Avispa)

Los seguidores de Víctor García y compañía estamos de enhorabuena. No son pocos los que opinan que el mejor disco de Warcry fue el primero, y que en los dos siguientes se perdieron en excesivas complicaciones. En cierto modo podemos decir que "¿Dónde Está La Luz?", esta su cuarta entrega, es una vuelta a los orígenes. Especialmente en la primera parte del CD, nos encontramos otra vez con composiciones directas, de las que entran sin esfuerzo y se disfrutan a tope en los conciertos. Es lo que realmente les va a ellos. En cambio, en la recta final en general los cortes se hacen algo más farragosos y nos devuelven de nuevo al sabor de los dos trabajos precedentes. Cosa, por otro lado, bastante normal. Para ser positivos, nos quedaremos con el lado bueno. Las letras son variadas, se tratan temas de actualidad ("El Regreso", por ejemplo), se habla de vivencias personales, y, por supuesto, no faltan referencias históricas ("Nuevo Mundo") ni mitológicas ("El Anticristo"). ¿Cuáles son las canciones más destacables? Tenemos "El Amor De Una Madre", una balada que musicalmente no es ninguna obra maestra, pero con en una letra de gran genialidad que a nadie dejará indiferente. En cuando al resto, las más dignas de ser resaltadas se detectan muy fácilmente en una somera escucha. Las dos joyas del disco son "Perdido" y la ya mencionada "Nuevo Mundo". Me costaría decir cuál es mejor de las dos. Sin duda ambas serán las mejor recibidas en directo y las que en un futuro se queden fijas en el repertorio de los asturianos. Como nada es perfecto, no podemos pasar por alto que lo peor del álbum no es uno de sus cortes, sino su más que mejorable portada. Parece mentira que los Warcry se hayan conformado con algo tan pobre y esquemático. En fin, pensemos en la música, que es lo que de verdad importa.
Nacho Jordán

RED WINE "Cenizas"

(Arise)

Como el que no quiere la cosa, los riojanos ya van por su cuarto trabajo. Llevan su cita anual a rajatabla. Tras lo mucho que me gustó su anterior entrega, "Sueños y Locura", cogí este último CD con muchas ganas. Y tras escucharlo a fondo, lo cierto es que me siento un tanto descolocado. De momento, "806", una intro que es una verdadera chorrada, ya te deja fuera de juego. Según van avanzando los cortes, se te pasa el mal sabor de boca. Parecen haberse esforzado en seguir evolucionando. Su progresión técnica es indiscutible, y quizá por eso les ha parecido oportuno hacer una música más elaborada, en parte más melódica, a ratos más oscura, y en muchos momentos bastante menos comercial. "Salva tu Hogar" o "Negando lo Evidente" tienen unos estribillos que se hacen interminables. No habrá quien los pueda corear en directo. No quiere decir que no estén bien, simplemente han cambiado. Ahora bien, los que estaban contentos con las power metaleras y pegadizas canciones de "Sueños y Locura" quizá ya no sigan tan conformes con lo que se van a encontrar ahora. Para gustos están los colores, cada cual tendrá su opinión. De todas formas, aún conservan algunas composiciones que recuerdan a la anterior etapa, como "Despierta", "Fantasma del Pasado", o "Vientos de Libertad". Esperaremos a su próximo disco a ver en qué para todo.
Nacho Jordán

STAFAS "Por Arte De Birli Birloque"

(Pies)

Detrás de este curioso título se esconde uno de los pocos trabajos que ha conseguido llamarme la atención del resurgido rock urbano nacional con nombres como Sinkope, Estrago o Marea entre otros (lo siento, me sigo quedando con Leño, Asfalto y Topo). En cualquier caso este nuevo proyecto del ex cantante y guitarrista de Canallas, Michel Molinera, acompañado por el batería Anono, el bajista Javier Del Palacio y por el guitarrista Manuel Maestre, me ha resultado realmente interesante, tanto por la frescura y calidad de sus composiciones, como por lo variado e intenso de sus letras. El sonido es puro rock & roll en la mayoría de los cortes, sobre todo en los primeros que abren el trabajo que me han enganchando con una facilidad y claridad difíciles de conseguir. Quizá porque en algunos fragmentos, sobre todo en “Viendo la Vida de Lado” me recuerdan a Los Enemigos de Josele Santiago, otra de mis bandas favoritas del género. “Dos Corazones” y “Suma y Sigue” son dos pedazo de temas que es difícil quitarse de la cabeza, con unas buenas letras y con un ritmo bacilón y directo que hacen moverse a cualquiera, bien secundados por “Ahora Que Todo Va Mal” (con intro de guitarra y coros del productor del disco Manolo Arias), la ácida “Cuando Ladran Los Gatos” y la magnífica “Cada Vez” en las que se notan los coros femeninos de Aranzazu Gil y Nuria Castro, que colaboran en el disco junto a Javier Novella también en los coros, Fidel Cordero en los teclados y Juan Tamayo en el saxo. “Golpes” sin embargo se me hace más cuesta arriba, con un rollo medio punk rock, reagge que nunca ha llegado a convencerme, a pesar de que tiene también una gran letra. En “138.252 €” se ponen más serios y oscuros dedicándola a las víctimas de los atentados del 11-M, un muy buen corte alejado del aire general más festivo del disco, aunque para mí no era necesario incluir al final la famosa intervención de Pilar Manjón en la Comisión de investigación del Parlamento, el tema ya es lo suficientemente bueno y emotivo por sí solo. Dejo para el final las dos versiones incluidas en el trabajo, muy logradas, con el toque rockero del grupo y con la voz de Michel dando mucho sentimiento en ambas. En primer lugar “El Progreso” de Roberto Carlos, que después de tantos años de su composición por desgracia aun sigue de plena vigencia por la barbarie ecológica en la que vivimos; y cierran con “El Hombre del Piano” de Billy Joel en la adaptación que en su momento hizo Víctor Manuel. Como podéis comprobar un buen compendio de canciones que harán las delicias de los seguidores del rock nacional, y que me da la impresión de que en directo tiene que ser una buena fiesta, vestuario a lo gansters años 20 incluido.
Mariano Palomo

TIMELESS MIRACLE "Into The Enchanted Chamber"

(Massacre Records)

Desde Suecia nos llega el primer trabajo de este cuarteto que bajo el nombre de Timeless Miracle nos ofrece su propuesta musical en forma de una docena de cortes que recogen los tópicos típicos del power metal más melódico (coros grandilocuentes, estribillos pegadizos, guitarras más agudas que efectivas y buenas dosis de doble bombo) combinados con una acertada dosis de elementos folkies con gaitas, flautas, violines y demás parafernalia que adornan pero no se convierten en protagonistas de las composiciones. Todo esto con un muy buen sonido de teclados, muy a lo Freedom Call (sobre todo en el tema que da título al disco “Into The Enchanted Chamber”), que palía bastante las limitadas prestaciones de las guitarras. Por lo demás la voz de Mikael Holst, también encargado del bajo, es bastante normalita, recordando en algunos pasajes a Kai Hansen (y no es lo único que recuerda a Gamma Ray del grupo, escuchar “Curse of The Wereworlf” y su continuación “Return Of The Werewolf”), pero muy bien acompañada por unos coros que son de lo mejor del trabajo junto con algunos estribillos brillantes como en “Witches of Black Magic” de las más potentes del disco, al igual que “The Devil” con un inicio a lo “Over The Hills” de Gary Moore que luego desemboca en un buen corte, efectivo y de los más melódicos del redondo, junto a la balada-medio tiempo “Memories” con un interesante aire a Avantasia de Tobias Sammet. Pegadiza y resultona es también “The Gates Of Hell”, a base de coros y teclados destacados. Más épicos se ponen en “Down To The Gallows” y en “The Red Rose”, cerca de Blind Guardian pero sin llegar a su intensidad, que contrarrestan con una mayor accesibilidad. El cierre viene con la extensa “The Voyage”, casi cuarto de hora para resumir todo lo que ofrecían en todos sus temas anteriores, bien llevada, pero que desde luego no será la más radiada de la temporada. Después de haber visto juntos en la misma crítica a Freedom Call, Gamma Ray, Avantasia o Blind Guardian creo que ya os quedarán pocas dudas de por donde van los tiros con estos suecos, así que si además de todo esto os gustan los toques folks, creo que acertaréis plenamente con esta obra. Los que estén un poco saturados de power mejor que se lo piensen. Si este disco hubiera salido hace unos cuantos años seguro que Timeless Miracle hubieran dado mucho más qua hablar.
Mariano Palomo

24 agosto 2005

DEREK SHERINIAN "Mythology"

(Inside Out / Mastertrax)

Cuando cogí por primera vez este cd entre mis manos, me predispuse a escuchar el disco de un virtuoso de los teclados y la programación. Sin embargo nada más lejos de la realidad. No tuve más que ver la cara posterior de la "promo" para empezar a replantearme esta idea inicial. Zakk Wylde, Steve Stevens, John Sykes, Marco Mendoza, Simon Philips... más de una decena de auténticos musicazos, más o menos conocidos, que no iban a participar en el proyecto de nadie si no era para dejar su propia marca de calidad. No tuve más que empezar a escuchar el primer corte, "Day of the dead" para darme cuenta de lo que tenía entre manos. En este primer corte Zakk Wylde, y sobre todo, Allan Holdsworth, se ocupan de las guitarras, mientras que Tony Franklin lo hace del bajo y Brian Tichy de la batería. Un tema de más de ocho minutos, compuesto especialmente para abrir el disco, en el que los solos de ambos guitarristas se alternan con Sherinian logrando que no haya un protagonista claro. Para el segundo corte, "Alpha Burst", cuenta con la colaboración de Steve Stevens, con el que trabajó durante tres años para Billy Idol. Fantástico medio tiempo en el que el duelo teclado vs. Guitarra se resuelve a favor del oyente, que puede disfrutar de la creatividad que ambos tienen para las melodías. "God of war" es una fantástica exhibición de John Sykes, que se complementa con los rudos sonidos de Wylde, y el excelente trabajo de Marco Mendoza, con quien Sherinian trabajó haciendo una gira por Japón con los Blue Murder de Sykes. Tras tres cortes puramente heavies de tintes progresivos, cambia el estilo para ofrecernos "Goin to church", música latina caribeña, en la que el piano se lleva todo el protagonismo, aunque Simon Philips realiza un trabajo de percusión inigualable. "El flamingo suave" lo presenta Derek en su página como un tema de flamenco. No sé que entenderá él por flamenco, pero esto no lo es. Una preciosa balada compuesta por Steve Stevens, con melodías de Steve Lukather que erizan la piel. "Trojan horse" es un rápido corte de aires progresivos, en el que el violín de Jerry Goodman cobra un protagonismo que no tuvo en "Day of dead", aunque estuviera. El tema está compuesto por Tichy y Sherinian, y está dedicado "...to the mighty Edward Van Halen". Toca tema cañero, su título es "One way or the other", y, a pesar de los solos de Sherinian, llama la atención la impresionante carrera que protagonizan Marco Mendoza (bajo) y Brian Tichy (batería). "A view from the sky" nos ayuda a respirar y relajarnos, preparándonos para el epílogo. "The river song" supone la primera vez que Sherinian compone un tema cantado. Bajo la influencia del blues, Zakk Wylde canta, a la par que realiza uno de los mejores solos de guitarra de todo el cd. Con una guitarra modelo Whammy bar (el resto del disco lo grabó con una Jackson Randy Rhoads model) logra la simbiosis perfecta entre la tradición y la modernidad, lo clásico y lo actual, el blues y el metal. En definitiva, el final perfecto para un trabajo al que no le falta de nada.
Carlos Treviño Cobo

EYEFEAR "9 Elements of Innervision"

(Massacre)


Primer disco que tengo oportunidad de llevarme al oído de esta multinacional formación, del que la única referencia conocida que tenía antes de escucharlos era la presencia en su seno del vocalista de los australianos Pegazus, Danny Cacati. Y aunque su voz es de lo más destacado del disco, no demasiado tiene que ver el estilo musical que desarrolla en este disco, con lo que hacía en Pegazus. Mucho más progresivo y elaborado, con una contundecia destacable en las bases rítmicas, y con buenos toques en las guitarras. Parecen querer llegar al nivel de gigantes como Dream Theater, Symphony X o Angra, y aunque no llegan a su calidad y brillantez, ni sobre todo a su accesibilidad, están en el buen camino. Hay temas destacados, como "Illumination Fades", "Where Clouds Divide" o "Down a New Begining" con protagonismo total para los teclados de Sammy Giaccotto y con la voz de Danny en su mejor interpretación, junto a la feroz "The Script of Sorrowed Tales", aunque inmediatamente después se relajan con "Vivid Window". Un buen detalle es su sonido y producción, con el guitarrista de King Diamond Andy LaRoque encargado de las mezclas en tierras suecas. Disco bastante interesante, dentro del dificil panorama del metal progresivo.
Mariano Palomo

SEVENTH AVENUE "Eternals"

(Massacre)

Dentro de un género tan trillado como el power metal, los alemanes Seventh Avenue parecen empezar a hacerse hueco entre los innumerables nombres del estilo. Llevan ya tiempo en el negocio, este "Eternals" supone su sexto trabajo en estudio, incluido el LP "Goodbye" de 1999, y por lo que había escuchado hasta ahora de ellos es su obra más destacada. Con buenas dosis de caña bien elaborada, pero sin dejar de lado melodías interesantes, tanto en las voces como en las guitarras. Tiene reminiscencias desde los más clásicos como Running Wild o Helloween, hasta otros más actuales como Stratovarius. La voz de Herbie Langhans sin ser nada del otro mundo cumple perfectamente su labor sin dejarse avasallar por la avalancha a golpe de doble bombo de su compañero Mike Pflüger y del bajista Markus Beck. Mucho tiene que ver también la ayuda en las voces del buen guitarrista Flo Gottsleben, claro seguidor de la estela del gran Victor Smolski (Rage) que se encarga de la producción. El disco destaca por su dinamismo, los temas son extensos en su mayoría pero no son cansinos, y aunque no hay demasiada variedad entre ellos, si que tienen buenos cambios en sus desarrollos bien guiados por la guitarra de Flo. Buenos ejemplos son el tema título, "Eternals" bastante Helloween, "Future Tale" con muy buenos coros, o "Remission" con buenos detalles de guitarra, al igual que en la más acelerada "Infinite King". Se desmarcan un poco de la línea acelerada del disco la balada "Voices", normalita, sin grandes alardes, y la instrumental "Storm III" bastante correcta. Un trabajo que, para lo que hay en la escena actual centro europea, bastante aceptable, aunque tampoco para volverse loco.
Mariano Palomo